El sentido de Constructores Perú, un proyecto político para el Perú del siglo XXI

El Perú ha entrado ya al siglo XXI y pronto celebrará 200 años de vida republicana. Viéndolo de manera optimista, el proyecto de la República del Perú se ha mantenido constantemente como una simbiosis histórica que ―parafraseando a nuestro gran historiador Jorge Basadre― debe, a la época prehispánica, la base territorial y una buena parte de la genética de su población; a la época virreinal, el mantenimiento de tal territorio y otra parte de la base genética poblacional; y, a la propia república, el sentido de la independencia y de la soberanía integrada como una nación.

Sin embargo, el Perú, como proyecto de vida ciudadana, está inacabado, pues las clases dirigentes no han podido promover en el territorio sobre el cual se desarrolla el Estado peruano, una razonable conviven-cia entre sus habitantes ni mucho menos les ha permitido a estos desarrollar los proyectos de vida que quieran tener. Al contrario, durante todo este periodo republicano, el país ha pasado por serios inconvenientes y se han desaprovechado oportunidades de desarrollo, dado que las clases dirigentes han traicionado a la población, pues han sido incapaces de marcar un derrotero hacia un futuro promisorio para todos los ciudadanos.

La situación actual, de evidente bonanza económica, pero de profunda insatisfacción colectiva y de desencanto generalizado del ciudadano alejado del centro de poder, demuestra justamente la carencia de proyectos políticos serios.

Es en ese marco de angustia existencial que surgió CONS-TRUCTORES PERÚ, como un proyecto político democrático que busca construir una nueva forma de organización del poder en la sociedad peruana, no solo a nivel nacional, sino también a nivel local y regional, que pase por el reconocimiento y promoción del máximo aprovechamiento de la vida y la libertad de todas las personas, entendiendo que la libertad solo puede darse de forma relacional, es decir, entendiendo que no hay libertad del ser humano como una entidad individual, sino solo del hombre o de la mujer en relación con otros.

El proyecto político construc-tor se plantea desde un punto de partida concreto e histórico: el Perú de inicios del siglo XXI, cuya población requiere de un referente común de identidad y ciuda-danía. En tal sentido, este proyecto pro-pone que todos los peruanos y peruanas, independientemente del sector social al que pertenezcamos, de nuestra cultura, etnia o raza, debemos ejercer, efectivamente, nuestra condición de ciudadanos y ciuda-danas y sentirnos incluidos en una identidad peruana común.

Como se ve, identidad y ciudadanía son las piedras angulares sobre las que se ha de fundar una república de verdad inclusiva.

La diversidad cultural del Perú no es un obstáculo para construir una identidad nacional peruana, que sea el resultado del sincretismo de las diversas identidades culturales existentes. No se trata de destruir o neutralizar las identidades locales o “puntos identitarios de partida”; sino de partir de ellas, de los orgullos, miradas o autoestimas que ya existen para lograr un nivel nacional de identidad peruana sobre la base de nuestra peruanidad mestiza, a la que le denominamos identidad chola.

Visto así, lo cholo no se refiere al proceso migratorio hacia la costa urbana, sino a las diversas expresiones del mestizaje peruano, que han de devenir en la promoción de una República de ciudadanos. Cuando hablamos de lo cholo, pues, no nos referimos a un asunto racial, sino a uno cultural; por tanto, de implicancias sociales y políticas.

De modo que afirmarnos cholos no es contradictorio con nuestros orígenes culturales y raciales, sino implica entendernos, más allá de esos datos, como integrantes de una misma comunidad política, que tiene una idiosincrasia, necesi-dades e intereses comunes.

Nuestra identidad se comple-menta con la construcción de una comunidad de ciudadanos en la que podamos afirmar la igualdad de oportunidades para todos y una real lucha contra las injusticias.

Evidentemente, para que ello no sea solo retórica, nuestra propuesta lleva consigo garantizar “pisos” de igualdad material para todos. Y esto requiere que la sociedad asegure a todos sus miembros: mínimos de alimentación, un espacio físico de intimidad, capacidad para movilizarse, oportunidades para cultivar las aptitudes personales (oportunidades flexi-bles de educación) y seguridad de su vida, integridad y posesiones importantes. Enton-ces, para los constructores, la política debe hacer posible el que todos realmente puedan gozar de esos mínimos necesarios para la subsistencia física y la expresión de la propia personalidad.

Para ello, CONSTRUCTORES promueve la creatividad como actitud política: más que nunca sabemos que los calcos o las copias son inviables en el mundo de hoy, y que el desarrollo humano, personal y comuni-tario, tiene que inventarse o reinventarse, al punto de tener que hacer y rehacer hábitos de relación y consumo. Estos nuevos pactos relacionales tendrán que ser voluntarios y serán promovidos por los constructores allí donde estemos; pero en la medida en que las mayorías depositen en nosotros su confianza para asumir las funciones de gobierno.

En suma, el proyecto de Constructores Perú es una tarea ardua y solo puede ser impulsada por una nueva élite política que comande responsa-blemente los cambios y coordine las fuerzas nacionales, consciente de su contexto social y su propio rol histórico (conciencia de la realidad y conciencia de sí), acreditando voluntad real de lucha y cambio (no meros impulsos o buenas intenciones), con un grupo comprometido (no personalida-des o caudillos) en torno a un proyecto común (no volunta-rismos ni respuestas solo coyun-turales).

Nuestro reto organizativo es construir esa élite política, lo que solo se podrá realizar si las peruanas y peruanos asumimos sin complejos nuestra identidad chola, sumando a la tarea de construir la nueva dirigencia política que el Perú necesita para forjar un proyecto nacional verdaderamente integrador.

Están ustedes, amigos lectores, invitados a integrar, apoyar y apostar por este gran proyecto. Los esperamos.